Este es un retrato que me gusta especialmente. Aunque ya tengo bastante explotado el monasterio de Sanfins y sus alrededores y, de hecho, ya había tomado alguna foto con este mismo fondo la necesidad te hace volver a los sitios que mejor controlas.
Y te das cuenta de que algunos sitios, después de todo, aún tenían mucho que aportarte.
Tienes una modelo a quien adora la cámara, una luz completamente diferente y una cámara más potente (y estás más curtido) y sacas un retrato que te encanta cuando no contabas mucho con él.
Supongo que es una invitación a que redescubra algunos de mis escenarios pasados.
Ella: Silvia Paone
photonikka.blogspot.com
www.facebook.com/Contremofotografia
0 comentarios:
Publicar un comentario