Una de las estampas más típicas de la capital francesa es la de los estudiantes, turistas y otras gentes que acuden a los pies del Sacré Coeur y se sientan en las escaleras para ver París.
Esta foto aún tiene un aquel, porque normalmente aquí parece que regalan algo y está completamente saturada de gente.
Montmartre es uno de los barrios con más personalidad de la ciudad, y fue el cuartel general de muchos artistas que sobrevivían como buenamente podían mientras contribuían a revolucionar el arte tal y como la entendemos. Aquellos que tanta hambre pasaban se hubiesen quedado pasmados si supiesen que esos cuadros que les rodeaban y que apenas tenían valor acabarían revalorizándose hasta cifras realmente obscenas.
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